Hace tanto tiempo que no escribo cosas tristes... Que hacen que me sienta una persona diferente,
tal vez mejor persona.
-Todos tenemos un lado oscuro- Me dijo y siguió cantando la canción que sonaba en la radio... el mio ya no se asoma tanto aunque no entiendo estos retorcidos
recuerdo como entré en una profunda desesperación por la cual sufrí mucho, padecí y morí.
Y ahora lo único que me hace sentir vivo es escuchar como mi corazón me late en la garganta y sonrío porque cada vez que esto me sucede mi mente la invaden recuerdos, llenos de polvo y algunos arrugados.
Crucé los brazos y levanté el rostro, pasé mis ojos alrededor de mi entorno mientras una de las maestras gritaba cosas sin sentido, no entendí mucho sus razonamientos... escucho un poco más y me rió de su egoísmo, olvidé completamente todo al ver sus gestos... tan grotescos y bruscos como los de cualquier humano imperfecto.
Leía uno de los versos de mi padre, escribió sobre como veía a la gente... cosa que me pone a pensar y como él dice, muchos recuerdan una cara, un cuerpo y hasta un defecto.
Me han preguntado varias veces y lo que me gusta son los ojos y las manos de la gente,
los ojos oscuros y con aire de gentileza, las manos grandes... tal vez mis gustos sean extraños
como casi cualquier artista... en cambio dudo un poco de que me guste la perfección, muchas veces me encantaría parar a la gente en la calle, porque existen personas tan hermosas que no puedes evitar mirarlas
sé muy bien que la anatomía humana puede ser una de las más complicadas y sin embargo,
me quiero complicar la vida haciéndolos iguales.
Me quiero exprimir la creatividad para estudiarla con cuidado,
y ahora mismo estoy ordenando mis ideas.
-Te quiero mucho- teclé en la computadora y puse "send"
-Te quiero demasiado- Fue el mensaje que respondió al mío y me hizo sonreír.
Hace realmente tanto tiempo que no escribo cosas tristes,
puede que me haya dado cuenta ahora o lo haga con el tiempo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario