Los grillos cantan y las flores callan

Maldecía con todo mi ser y mi corazón inerte a las verdades insensatas y razonamientos de mi mente,
me retorcía por dentro lleno de tristeza,
luego quise morir,
lo peor es que realmente no tenia remedio.
No quise hacer nada mas que quedarme frente a la computadora tecleando lo que mi conciencia decía a gritos,
me duele la cabeza,
me duele el corazón,
porque no se...
porque no se nada.
Siento que las lágrimas se acumulan en mis ojos,
al mismo tiempo que recuerdo un poema,
que yo escribí, y que olvide.
Mis emociones son como clavos que se ensartan en todo mi cuerpo,
y olvido de nuevo,
con la receta del zumo mágico de un libro antiguo, viejo.
Prometí demasiadas veces no volver a aquello
y desobedecí el doble.
Hace tanto que me contengo, me muerdo la lengua mientras escucho todas las blasfemias estúpidas,
y eso es lo que mas me duele,
no puedo creer,
porque aqui dentro de mi ya no hay nada,
todo se hizo cenizas.
La poca fe que me quedaba se fue volando con el viento
y el ultimo amor que me quedaba se lo entregue a un extraño.
Quisiera ya no tener que aguantar mas
y desaparecer en la neblina
solamente como un simple fantasma
se apago la musica en mi corazón.
¡Ahora solo quiero que me dejen en paz!
Por favor no me atormentes mas, amor.

Cuando crei vivir un viernes

Que es esta felicidad tan grande? Que da la impresion de ser eterna, agradable...
Y cuando pienso en todo mi corazon se siente retumbante, ya no muerto.